18 junio, 2019

LOS PADRES MS DEBEMOS TENER SENTIDO DE ESCUCHA, PACIENCIA Y COMPRENSIÓN.

Cada día al regreso de tanto tiempo de silencio en la escuela, o evento social, suelen pasar dos situaciones:

1-Explosión de enojo y llanto por haber soportado injusticias.

Es muy común para cualquier niño haber tenido un mal día escolar, pero ¿Imagínate no haber podido responder a una injusticia, a una mentira, a una falsa acusación, a un maltrato, a un rechazo, y no poder poner en palabras tu defensa, tu enojo y frustración y aguantártelo durante horas para no ser motivo de miradas?

Los padres debemos ser fuertes, pensantes, no perder la calma, 'no echar mas leña al fuego', no minimizar lo que se siente, pero sobretodo poner el abrazo, la contención, la escucha, y ser prácticos para guiarlos a que ellos mismos descubran formas positivas e inteligentes de resolver conflictos. Si nos sumamos al enojo con enojo, o por el contrario no ayudamos minimizando sus preocupaciones, irán cerrándose cada vez que les suceda un conflicto, y la ansiedad se irá sumando.

2-Charla sin pausa por compartir todo lo vivido.

Es muy común el relato de lo que hicieron o dijeron los demás, ya que el niño no participó en esos diálogos y necesita comentar lo que opina y lo que siente sobre lo ocurrido. Es muy importante escuchar con real atención y darle la importancia que tiene para ellos, no es por el hecho de enterarnos de sus cosas, sinó para que puedan expresar sus dudas, inquietudes, y confiar lo que sienten con nosotros, dando su opinión. Cuando hayan notado poca predisposición nuestra o fastidio ante la necesidad de hablar, logicamente comenzarán a dejar de hacerlo, no siendo muy saludable para ellos.
Encontrar sin presionar ni exigir esos momentos de confianza donde puedan expresarse libremente, especialmente aquellos pensamientos negativos frente a lo sucedido, para que puedan escuchar perspectivas mas objetivas y positivas.

 En el espacio de terapia familiar podemos hablar de este tipo de apoyo necesario que los padres pueden dar cuando los niños regresan de un evento social, como la jornada escolar.

Para ambas situaciones, como comencé desde el título: ESCUCHA, PACIENCIA Y COMPRENSIÓN es la manera de ayudar, sostener, y guiar a un niño que sufre ansiedad en la interacción social.

Aclaración: llegada la adolescencia es muy común que el deseo de dialogar lo vivido ya no sea con la misma intensidad que en la niñez. Aquí es necesario que tengan aprendido que estaremos siempre presentes para escucharlos y apoyarlos. Recordar preguntar si desean nuestra opinión y consejo, y respetar si no lo quieren.

Que el cariño, la amabilidad y el respeto nos guíe.

Edición de Marie Martínez.
Imagen web.