28 marzo, 2018

TRATAMIENTO PARA MUTISMO SELECTIVO:


Con un manejo y tratamiento apropiados, la mayoría de los niños pueden superar el mutismo selectivo. Pero cuanto más grandes son cuando se diagnostica la condición, más tiempo tomará.
La efectividad del tratamiento dependerá de:
Cuánto tiempo la persona ha tenido mutismo selectivo.
Si tienen o no comunicación adicional o dificultades de aprendizaje o ansiedades
La cooperación de todos los involucrados en su educación y vida familiar.
El tratamiento no se enfoca en hablar solo, sino que reduce la ansiedad asociada con el habla.
Esto comienza eliminando la presión sobre la persona para que hable. Luego, gradualmente, deben pasar de relajarse en la escuela, guardería o entorno social a decir palabras sueltas y oraciones a una persona, antes de poder hablar libremente con todas las personas en todos los entornos.
La necesidad de un tratamiento individual puede evitarse si la familia y el personal en los primeros años trabajan juntos para reducir la ansiedad del niño al crear un ambiente positivo para ellos.
Esto significa:
-No dejando que el niño sepa que estás ansioso.
-Asegurándoles que podrán hablar cuando estén listos.
-Concentrándote en divertirse.
-Elogiando todos los esfuerzos que realiza el niño para unirse e interactuar con otros, como pasar y llevarse juguetes, asentir con la cabeza y señalar.
-No muestres sorpresa cuando el niño habla, pero responde afectuosamente como lo harías con cualquier otro niño.
Además de estos cambios ambientales, los niños mayores pueden necesitar apoyo individual para superar su ansiedad.
Los tipos de tratamiento más efectivos son la terapia conductual y la terapia cognitiva conductual (TCC) . Estos se describen a continuación, junto con algunas técnicas de uso común para superar la ansiedad.
Terapia conductual.
La terapia conductual está diseñada para trabajar y reforzar los comportamientos deseados mientras reemplaza los malos hábitos con buenos.
En lugar de examinar el pasado de una persona o sus pensamientos, se concentra en ayudar a combatir las dificultades actuales utilizando un enfoque gradual paso por paso para ayudar a vencer los temores.
Varias de las siguientes técnicas pueden ser utilizadas al mismo tiempo por individuos, miembros de la familia y personal de la escuela o la universidad, posiblemente bajo la guía de un terapeuta del habla y el lenguaje o un psicólogo.
Desvanecimiento de estímulos.
En el desvanecimiento de estímulos, la persona con mutismo selectivo se comunica a gusto con alguien, como su padre, cuando no hay nadie más presente.
Se introduce a otra persona en la situación y, una vez que se incluye en hablar, el padre se retira. La nueva persona puede presentar a más personas de la misma manera.
Refuerzo positivo y negativo.
El refuerzo positivo y negativo implica responder favorablemente a todas las formas de comunicación y no inadvertidamente fomentar la evitación y el silencio.
Si el niño está bajo presión para hablar, experimentará un gran alivio cuando pase el momento, lo que fortalecerá su creencia de que hablar es una experiencia negativa.
Desensibilización
La desensibilización es una técnica que implica reducir la sensibilidad de la persona a otras personas que escuchan su voz al compartir grabaciones de voz o video.
Por ejemplo, el correo electrónico o la mensajería instantánea pueden preceder a un intercambio de grabaciones de voz o mensajes de correo de voz, lo que lleva a una comunicación más directa, como conversaciones telefónicas o de Skype.
Organización.
La configuración implica el uso de cualquier técnica que permita a la persona producir gradualmente una respuesta más cercana al comportamiento deseado.
Por ejemplo, comenzando con la lectura en voz alta, luego tomándola por turnos para leer, seguida de juegos interactivos de lectura, actividades estructuradas de conversación y, finalmente, una conversación bidireccional.
Exposición gradual
En la exposición gradual, las situaciones que causan la menor ansiedad se abordan primero. Con objetivos realistas y exposición repetida, la ansiedad asociada con estas situaciones disminuye a un nivel manejable.
Se alienta a los niños mayores y adultos a calcular cuánta ansiedad causan las diferentes situaciones, como responder el teléfono o preguntarle a un extraño el momento.
Terapia de comportamiento cognitivo
La Terapia Cognitiva Conductual (TCC) funciona al ayudar a una persona a enfocarse en cómo piensa sobre sí misma, el mundo y otras personas, y cómo su percepción de estas cosas afecta sus pensamientos y sentimientos. TCC también desafía miedos y preconcepciones a través de la exposición gradual.
La TCC es llevada a cabo por profesionales de la salud mental y es más apropiada para niños mayores, adolescentes, particularmente aquellos que experimentan trastorno de ansiedad social, y adultos que han crecido con mutismo selectivo.
Los niños más pequeños también pueden beneficiarse de los enfoques basados ​​en CBT diseñados para apoyar su bienestar general.
Por ejemplo, esto puede incluir hablar sobre la ansiedad y comprender cómo afecta su cuerpo y comportamiento, y aprender una serie de técnicas de manejo de la ansiedad o estrategias de afrontamiento.

Fuente:Texto de la Clínica NHS, Inglaterra, Irlanda del Norte, Escocia y Wales.
Trabajo de adaptación al español por Marie Martínez- Argentina-  https://mutismoselectivo-textos.blogspot.com/